Mié 16 octubre 2024

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M. WARD – MIGRATION STORIES

A la indudable calidad y talento que atesora M. Ward, hay que añadir que a lo largo de su carrera, su personal interés y búsqueda de una evolución personal y artística, le han hecho facturar algún trabajo más irregular que el resto —si bien es cierto que esta irregularidad sería casi la excelencia para algunos artistas o bandas actuales que cosechan un mayor éxito a nivel de cifras—. Tras el sorpresivo What A Wonderful Industry (2018), el artista californiano ha vuelto a la senda de sus mejores años, publicando un décimo disco exquisito, coherente y a la altura de los más sobresalientes trabajos de su carrera.

Migration Stories suena noctámbulo, trasnochador y vibrante. La sensación de reverberación sinuosa que se evidencia en momentos de soledad, a altas horas de la madrugada, es constante a lo largo de todo el álbum. La propia portada del mismo enfatiza esta idea, dejando de manifiesto una pátina de deliciosa melancolía en el desarrollo de todo el trabajo.

La temática que se recoge en estos once cortes proviene de historias propias y ajenas, conocidas y desconocidas por su autor, pero todas con la migración como hilo conductor, como telón de fondo de un álbum que, si bien sería algo pretencioso decir que es conceptual, sí que recoge un mismo objetivo narrativo —aunque musicalmente sí que sea mucho más variado que a nivel de textos—. Historias dramáticas, pero también de búsqueda, de esperanza, de libertad y de sueños, sobre todo de sueños. Cumplidos, por cumplir o frustrados, pero sueños al fin y al cabo.

El nuevo larga duración de M. Ward navega en todos los estilos y géneros que él mismo ha ido desarrollando en toda su trayectoria, sin terminar de definirse como folk, blues, soul… Quizás sea esa una de las mayores valores del disco: abarcar diferentes mundos con coherencia y exactitud, manteniendo una personal manera de construir las canciones pero sin dar volantazos ni giros bruscos, buscando siempre el encaje perfecto de cada uno de los elementos. Hay una indudable calidez en la atmósfera creada por su autor, que dota de gran belleza a Migration Stories, sea cual sea la historia que se narre en cada corte y la dureza o dramatismo que conlleven.

La capacidad innata de M. Ward para dar forma a melodías absolutamente arrebatadoras se patenta en cortes como Heaven’s Nail And Hammer, con un aire clásico que nos devuelve a lugares que, aunque no hayamos conocido, están dentro de nuestra inconsciente como parte de nuestra vida. El lado más blues y descorazonador viene de la mano de Coyote Mary’s Travelling Show, cuya instrumentación dota de cierta dulzura sonora a una pieza que, a priori, podría sonar más áspera que las demás, más arenosa y polvorienta.

Tras el interludio instrumental Steven’s Snow Man, el disco se ilumina con la colorida melodía de Unreal City, volviendo a dejar claro su autor que no se ancla en una única manera de construir las canciones y demostrando que su dominio musical trasciende las etiquetas y los adjetivos. Así ocurre también con Along The Santa Fe Trail, una bella pieza con aires folkie y un inusitado optimismo en su interior.

Con Rio Drone, el breve corte instrumental que cierra este Migration Stories, M. Ward nos vuelve a mecer en un sueño esperanzador, solitario y en cierto modo, reconfortante.

Javier Decimavilla
Javier Decimavilla
La música nos puede salvar la vida o al menos mejorarla. Bob Dylan, Neil Young, David Bowie, The Beatles o The Rolling Stones, entre otros, nos llevan enseñando el camino a la felicidad desde hace décadas.
A la indudable calidad y talento que atesora M. Ward, hay que añadir que a lo largo de su carrera, su personal interés y búsqueda de una evolución personal y artística, le han hecho facturar algún trabajo más irregular que el resto —si bien...M. WARD - MIGRATION STORIES