Fotografías: Nacho Argañarás @panteraphotostudio
Mujeres publicaron en mayo Horizontal en Llamas, el primer adelanto de su nuevo disco, Desde Flores y Entrañas, que verá la luz el 6 de octubre. El single fue la primera canción en aparecer, pero también es el último tema del álbum: una despedida dreamy, un sueño para concluir un LP de diecisiete canciones que componen «un viaje que sube, que baja», nos explican.
El grupo tenía pensado publicar el disco en primavera y de repente se vio con mucho más tiempo para prepararlo. Con calma, Mujeres experimentan, disfrutan del proceso de grabación, y la consecuencia es un álbum diferente al que tenían pensado en un principio, un «derramamiento de temas» donde exploran todo lo posible y nos dan «lo mejor que tienen».
Junto al disco, crean El Club de los Sentimientos, que es también el nombre de la gira con la que la banda tocará alrededor de la península. El club surge «de la idea de compartir un Google Maps con bares de carretera», de ampliar el radio de acción de la banda y de un montón de cosas más. En ese totum revolutum efectivísimo, Mujeres han preparado cenas románticas a sus fans y han creado un consultorio, donde resuelven dudas existenciales como «¿menú del día o bufé libre?», «¿tenéis un piti?» o «¿soy un borracho o un procrastinador?». Ahora en serio: el club refuerza una de las ideas centrales del disco, la expresión de las emociones tratando «sin tapujos muchas cosas de las que no hablamos, pero de las que queremos hablar», nos cuentan.
Hablamos con Yago (voz y guitarra), Arnau, alias Tito (batería), y Pol (bajo) por videollamada el mismo día que se me inunda la cocina. Todo es líquido, la comunicación de hoy en día y el agua que no sé cómo achicar, menos las respuestas de los tres componentes de la banda que, aun a través de la pantalla, hacen sentir al otro como en casa -en una casa simbólica sin lavadoras rotas, quiero decir-.
De este disco, según he podido leer, decís: «Confeccionado con pasión y tranquilidad durante una época extraña». Lo de la pasión y la tranquilidad podemos hablarlo después, pero ¿qué podéis contarme de esa época extraña?
Arnau: Mientras estábamos preparando el disco, y de hecho poco antes de ir a grabarlo, Yago tuvo una lesión muy grave de espalda. Estando a punto de sacar un disco, nos vimos en una situación extrañísima: por primera vez los tres no podíamos hacer nada más que esperar. Eso, aunque fue una desgracia, nos dio mucho más tiempo para rematar el disco, para revisar las letras y los arreglos. Por eso decimos lo de «tranquilidad», porque siempre vamos corriendo componiendo y grabando. Esta situación tan atípica hizo que tuviésemos mucho más tiempo para darle vueltas a las canciones e ir con los temas súper preparados al estudio.
Pol: Si no hubiera pasado esto, el disco sería otro y habría muchas canciones que ahora aparecen, pero que no existirían. A la extrañeza también se suma haber podido alargar y ampliar el disco que teníamos, que es totalmente distinto. En enero, durante la grabación, también pasaron cosas extrañas, incidentes familiares que se suman a ese primer accidente que lo retrasó todo un poco.
El disco se graba en enero de 2023 y se publica el próximo 6 de octubre. ¿Cómo se plantea su origen? ¿Surge de la idea de grabar un disco en sí, surge al ir recopilando temas que ya teníais o es una mezcla de las dos cosas?
Yago: El disco ya estaba planificado para salir. Nosotros sacamos un disco durante la pandemia, el anterior largo fue en 2020, al año y algo sacamos el EP el de Rock y Amistad de colaboraciones, y al cabo de un año ya estaba previsto que nos pusiéramos a trabajar en el LP. Ha habido un retraso de seis meses, igual este disco hubiese salido en primavera, porque estaba planificado para grabarse en septiembre, pero es que me ingresan la semana antes de ir a grabar, fue todo muy dramático. No recuerdo si había alguna cosa que rescatamos del pasado, ha sido un disco bastante currado ahora, durante este tiempo.
Arnau: Siempre trabajamos a partir de demos, de cosas que tenemos de anteriores discos que no han entrado, siempre revisamos. Pero quizás en este disco hay un par de ideas, no más, que se han quedado de alguna vuelta que nos gustaba o alguna parte que decíamos «hostias, esto sí que puede valer». En cada disco tiramos de demos incluso de Un sentimiento importante, cosas que en ese momento no entraban o que no sabíamos cómo solucionar.
Yago: Me acabo de acordar de que Por lo visto ya da igual es una canción anterior, o al menos tiene una parte de hace tiempo.
Pol: Respecto a lo que preguntas, no somos un grupo que diga «venga, vamos a hacer un disco, escogemos un tema, vamos a armarlo y a crear una obra con sentido». Vamos ensayando, vamos recopilando temas, hacemos los temas pensando en el directo y también en el equilibrio que puede tener el propio disco, que no sea todo igual. Intentamos meter una balada, luego otro tema más cañero, otro más pop. Pero no nos planteamos un disco desde cero y lo construimos, sino que se va haciendo a medida que vamos ensayando. A nivel temático y a nivel de letras sí, una vez ya tenemos las canciones, sabemos más o menos de qué queremos hablar. Es al hacer las letras y al ponerle sentido a las melodías donde se va conformando el disco y su idea.
Desde Flores y Entrañas tiene diecisiete canciones. Con un público que a veces parece estar acostumbrado a escuchar singles, en un momento en el que se tiene poca paciencia por lo general, ¿cómo creéis que va a ser el recibimiento? ¿Estáis de acuerdo con esto de que la gente cada vez escucha menos discos?
Pol: Estamos de acuerdo en lo que dices. En estos tiempos la gente no escucha un disco entero, seguramente se queda con los singles y se hace sus listas. Nos hacía gracia ir a contracorriente, de repente hacer un disco largo, con diciesiete temas. Pero también la idea primigenia era hacer un disco de unas doce canciones y luego ir sacando singles físicos de vinilo con caras B. En esas caras B, queríamos experimentar y hacer canciones un poco alejadas del canon Mujeres.
Cuando tuvimos todo grabado, hablando entre nosotros y con el sello, pensamos «¿por qué no lo metemos todo junto en vez de ir sacando los singles?» También lo vimos como una forma de impacto. «Coño, después de un parón más o menos largo, Mujeres vuelven con doble disco de diecisiete canciones». Esperemos que eso a nivel comercial también impacte. Tú nos lo estás preguntando, así que quizás más o menos ha tenido su utilidad. Salir con un disco largo no funciona sabiendo cómo van las cosas con lo de que la gente solo escucha singles, pero sí es un impacto, sacar un derramamiento de temas gigante llama la atención.
Estamos de acuerdo contigo: la gente es de listas, es raro gastar tantos temas en un disco. Con este podríamos haber hecho dos discos perfectamente.
Las canciones quedan fijadas, quedan registradas y te dan la capacidad de poder condensar una idea
Ahora que mencionáis los singles, habéis publicado cuatro en total, entre ellos ‘Horizontal en Llamas‘, la canción que cierra el disco. Este tema parece un sueño, es una buena despedida. ¿Qué podéis contarme de esta canción? ¿Es casual que cierre el disco?
Yago: Siguiendo algo que ha dicho Pol antes, hay una cosa que nos planteamos en este disco que al ganar tiempo fue a más: la variedad. Nuestro anterior disco, por ejemplo, era como un pepino, iba de la primera canción a la última, todo caras A, es un disco que lo tocarías todo en vivo, todas las canciones, sin descartar ni una. Pero ahora ha sido buscar diferentes sonidos y explorar cosas, también por el tiempo, por disfrutar más la grabación.
Una de las cosas que introdujimos era tener todo montado, los teclados y demás, y hacer muchas cosas improvisando, dando muchas vueltas. Temas muy machacones, mucho más psicodélicos, si quieres, de lo que normalmente hacemos, más dreaming. Horizontal en Llamas salió un poco así. Las notas de Pol ya las había tocado alguna vez así, improvisadas. Decidimos que no iba a tener batería, que no iba a tener guitarra y que en ese sentido se iba a separar mucho de lo demás.
Luego, lo del cierre, la verdad es que nosotros somos muy fans de la música y somos todavía de escuchar discos enteros, compramos mucha música. Siempre hemos sido bastante fans de la última canción, hay muchas últimas canciones que nos gustan mucho, que no son necesariamente singles, pero que son canciones muy enigmáticas y muy misteriosas de muchos grupos. Nos encajaba mucho, tenía que ser la última.
Pol: De hecho, bueno, es un apunte de mierda el mío [risas]. Cuando nos has preguntado si reciclábamos cosas antiguas, realmente las líneas, los acordes de esta canción vienen desde los tiempos de Martí, cuando éramos cuatro. Ahí sí que ha habido un reciclaje intenso. Pero a veces vas ensayando, te vuelven las cosas y las recuperas. Esto no lo recuperamos de una demo ni de nada, lo volvimos a tocar por casualidad, por cachondeo incluso, y ahí surgió el tema.
Arnau: Me parece súper interesante que siendo el tema más lento que hemos hecho nunca, tenemos bastante claro que podría encajar perfectamente en directo. Un tema tan desnudo y tan emotivo, porque para mí la letra y la cadencia de la canción es muy emotiva, puede funcionar muy bien en medio de un directo nuestro. Me gusta la idea de que no tiene que ser todo con batería, no tiene que ser todo tan acelerado, simplemente puedes poner esto y que te rompa la idea de un concierto nuestro. Funciona para todo: para el directo, para escuchar en tu casa, para ir en el metro, nos salió bastante bien esta canción.
Ahora que mencionáis el directo, ¿cómo se plantea la presentación de un disco de diecisiete temas? Depresión Sonora, por ejemplo, nos contó en una entrevista que le gustaría tocar su disco nuevo entero, en orden: de principio a fin.
Arnau: Difícil, se plantea difícil. Cuando tienes seis discos la criba es dolorosa porque hay temas a los que les has cogido muchísimo cariño, hay temas que gustan mucho, hay temas que te cansan… Ya hemos tenido esta conversación. ¿Qué tenemos que quitar? Nosotros igual haremos ahora un set un poco más largo en la presentación del disco, pero hay temas que se tienen que ir fuera, y hay canciones que se resisten. Ya sea porque llevas mucho tiempo tocándolas, hay otras que ya sabes que se tienen que ir pero no eres capaz de dejarlas ir, es un momento difícil. Tendremos que hacer una votación y ver.
Pol: Se viene una criba complicada. Lo hemos hablado mucho en el local. No somos un grupo de hacer ejercicios como el de Marcos y tocar todo el disco. Tenemos muy en cuenta al público, a la gente que nos escucha, y menuda pereza ir a un concierto y que toquen todo lo nuevo. Tú quieres escuchar los temas míticos de la banda, no puedes no tocar los hits. No vamos a hacer algo tan egoísta, quizás, de tocar todo el álbum y ya está. Pero hay complicaciones, hay muchas canciones difíciles de tocar, como dice Tito. Hay diecisiete canciones y no hay espacio en el setlist. No sé qué coño haremos [risas]. Haremos tres o cuatro setlist distintos e iremos combinándolos.
Yago: El otro día salió esta idea, ten en cuenta que hacemos normalmente veinte, veintidós temas en un directo como mucho. En sala, me refiero. En un festival, donde tienes menos tiempo, tocamos menos. Con diecisiete temas imagínate cómo te queda el setlist, sólo con que quieras tocar cuatro clásicos… Son seis discos, será complicado. Como al final hay canciones que tienen estilos similares, iremos cambiándolo. Lo veo muy difícil [risas].
Pol: Y suerte que no tocamos los temas en inglés.
Yago: Madre mía, qué horror.
En una de vuestras canciones, decís: «A veces hay que rendirse a la emoción y los sentidos». ¿Es más sencillo expresar los sentimientos a través de la música que a través de una declaración en persona, de una charla en el tú a tú?
Pol: Una pregunta muy del Club de los Sentimientos [risas].
Yago: La tendrías que haber mandado, y te lo contestamos en el consultorio, porque ahora aquí en directo es complicado esto.
Arnau: Yo esta pregunta la hilo a una pregunta que nos hicieron que era como: «¿por qué una canción te llega más que cualquier otra cosa?» En una canción nadie te replica, es decir, solo tienes tu visión de cómo te llega la canción según tu estado de ánimo y te la haces para ti. En una conversación siempre tienes a alguien que te está contestando a lo que tú dices, a lo que preguntas, a lo que requieres. Creo que una canción es un espacio seguro. Si quieres llorar, ya sabes qué disco te puedes poner, o si quieres salir de fiesta, o si estás enfadada. Ya hay grupos y canciones que dices «pf, este tema habla de mí cien por cien, de ese verano que pasé en Lloret del Mar».
Una conversación siempre cuesta más, porque tener que expresar lo que piensas o lo que sientes es complicado, y tampoco te enseñan a hacerlo. Te cohibes más. No sé si era eso lo que preguntabas, pero bueno, yo me enrollo y ya me lo he llevado a mi terreno [risas].
Yago: Yo creo que hay una diferencia muy clara entre hacer una canción y decirlo o pronunciarse. Las canciones quedan fijadas, quedan registradas y te dan la capacidad de poder condensar una idea. Igual en una conversación también lo haces, pero no es exactamente lo mismo, puede fluctuar. En una canción el significado también puede ir cambiando con el tiempo, pero digamos que eso siempre queda ahí, que hay como un residuo.
Sobre la canción a la que te referías, fue como muy clara, es un tema central del disco. Tiene que ver con El Club de los Sentimientos pero a la vez es independiente del disco. Fue un momento en el que decidimos centrarnos en la cuestión de las emociones y hablarlas rasgándonos las vestiduras, diciendo «oye, no pasa nada porque de golpe quieras abrir todo eso». La frase que mencionabas va un poco por ahí, de forma muy evidente subrayar eso que queremos que se entienda mucho en el disco. No como una cosa de autoayuda, que es algo que también se ha ido hablando, sino más bien como una cuestión de andar sin tapujos con eso.
En El Club de los Sentimientos, poder ver cómo la gente de golpe se lanza a la que abres canal, precisamente porque editas música y eso llega a la gente y lo transmites y es como un puente, ha sido súper bonito. Ha sido sorprendente también ver el tipo de preguntas que te hace la gente, cómo quieren hablar del tema, porque realmente hay muchas cosas de las que no hablamos y queremos hablar de ellas.
Pol: Al ser un grupo que llevamos tanto tiempo se van solapando ideas y conceptos. El Club no estaba pensado. Sobre el disco habíamos comentado lo que dice Yago, la canción iba a hablar de esto, pero la idea del Club surgió después, aunque es anterior. Todo se va encajando de una forma extraña, supongo que es por los años y porque nosotros hacemos las letras y hacemos estas propuestas. Al final se logra que todo lo que haces tenga un sentido y una cohesión.
Como peña que va a conciertos y como banda, las salas siempre han sido importantísimas
Aprovechando que lo mencionáis, para la gente que vaya a leer esto y todavía no lo sepa, ¿qué es El Club de los Sentimientos?
Yago: Como te decía Pol, la idea, el nombre, la marca, ya la teníamos en mente porque queríamos ampliar el radio de acción del grupo, para que Mujeres no fuese solo un grupo de música que saca canciones y toca, igual podía ser algo más. Que también pudiese ser una fiesta, eventos de cualquier tipo que no tuviesen que ver estrictamente con lo musical. Cuando lo hablamos con el sello, fue derivando en la idea de que era algo muy explotable en el buen sentido y que podía tener muchas posibilidades.
Acudimos a la vieja idea del club de fans al que tú acudías por carteo, y como el grupo tiene esa cosa un poco nostálgica nos cuadró. Pero ahora mismo ha sido esto, es un espacio que nos ha ayudado a poder crear engagement con el disco y poder comunicar el disco de otra manera. Servirá para hacer un par de conciertos diferentes que también serán El Club de los Sentimientos, pero no tenemos ni idea de a dónde va a llegar esto. Hay otras ideas que pueden ir surgiendo.
Pol: Lo que decía Yago al principio era hacer, por ejemplo, sesiones de DJ en salas de conciertos bajo el nombre de El Club de los Sentimientos, hacer pop up store y vender nuestro merchandising, hacer cosas con serigrafía…
Yago: De golpe podría también ser una exposición, o podría ser unas charlas, se trata de ampliar.
Arnau: Empezó con la idea de que podíamos compartir un Google Maps con bares de carretera, y mira ahora dónde estamos [risas]. A ver dónde acabamos. Mola porque no tienes ningún tipo de corsé, tú puedes hacer lo que quieras. Creo que la gente lo ha abrazado con mucha ilusión, con cariño. Si igual hubiésemos sido otro grupo, la gente no se hubiera apuntado. Tenemos la suerte de que la gente que nos sigue entiende muy bien nuestro humor, nuestras ideas. Eso siempre es de agradecer y te da bastantes fuerzas para seguir haciendo cosas diferentes.
Mujeres crece tocando en las salas. Con la pandemia hay un parón, muchas salas de conciertos quiebran y cierran para siempre. Ahora que se ha acabado el Covid parece haber un boom, pero de festivales masificados, de WiZinks, de precios desorbitados. ¿Cómo veis el panorama actual de la música en directo? ¿Estamos, como dicen muchos, en una burbuja que va a estallar en algún momento?
Yago: Hay esperanza, hay salvación, no se acabará el mundo con esto, pero sin duda sí vivimos en la burbuja. En algún momento terminará y viviremos otro ciclo. Ya pasamos por ahí, nosotros llevamos dieciséis años y ya pasó algo similar junto con la crisis económica en la que ya no era solo una cuestión de los promotores, los precios y los macrofestivales, sino que también había un problema directamente con los alquileres de las salas. Hubo un momento en el que era impracticable organizar un concierto por tu cuenta dentro de lo que es un circuito comercial y público, luego están los centros cívicos, las casas okupas, fiestas ilegales, raves y demás.
Los estadios a nosotros nos quedan súper lejos, no nos vemos ahí. Los tres estamos súper orgullosos de haber sacado una gira tan larga y tan ambiciosa por salas, de querer tocar casi en toda la península. Cuando nos pasaron la propuesta, insistimos en ir a un par de sitios más. Para nosotros las salas han sido muy importantes durante mucho tiempo, los festivales nos ignoraban, no teníamos cabida allí. Tampoco hemos estado muy locos por estar en los festivales, ni hemos sido súper clientes de ellos. Hemos crecido en salas y hemos visto a los grupos en salas, es importantísimo para nosotros. Hemos luchado mucho para poder ir con teloneros y que la gente esté satisfecha de pagar su entrada. Aun así, hay cosas como precios de entradas que a veces hemos discutido.
Pol: Nos sorprende mucho que haya grupos que estén empezando, o que llevan un tiempo pero tampoco excesivo, que no los ves haciendo giras de salas, siempre los ves haciendo los mismos festivales, haciendo su ruta nacional así. Creemos que es una mala estrategia. Si esto revienta, se van a encontrar a la deriva en algún momento, porque como banda no puedes estar siempre formando parte del pack que ofrece un festival. Tienes que tener tu propio valor y que la gente solo pague para verte a ti en una sala, en un espacio más pequeño, que te aprecien a ti y no ser parte de un gran menú de buffet libre en el que hay otros grupos. Como dice Yago, como peña que ha ido a conciertos y como banda, las salas siempre han sido importantísimas.
Sobre lo que dices de la pandemia, muchos grupos se echaron para atrás, no sacaron disco, decidieron no girar y nosotros decidimos tirar para adelante. Fue una época en la que, entre comillas, tocamos bastante justamente por esta falta de movimiento. Nos fue bastante bien tanto el disco como los directos en ese momento infernal, curiosamente.
Por último, si pudierais decirle algo -una aclaración, una advertencia- a alguien justo en el momento antes de que escuche Desde Flores y Entrañas, en el minuto previo a que le diera al play, ¿qué le diríais?
Arnau: A mí me gustaría decir algo tan sencillo como que esto es todo lo que tenemos, pero no en el sentido de «esto es lo que hay». De toda la variedad musical que hemos conseguido generar después de dieciséis años, esto es lo mejor que podemos hacer, aquí os lo damos. Como decía Yago, nos hemos abierto al máximo, hemos intentado explorar todos los palos del rock and roll que podemos hacer y esto es lo mejor que tenemos. Parece una tontería, pero es algo tan sencillo como que aquí no hay relleno, simplemente somos nosotros tres haciéndolo lo mejor que podemos para que la gente lo disfrute.
Pol: Ha sido como «esto es todo lo que tenemos, lo sentimos mucho» [risas]. Hostias, yo no sé vosotros, pero quizás al ser el sexto disco o al haber tenido tanto tiempo para prepararlo, diría que a ver si hemos logrado transmitir la ilusión que hay puesta detrás de este disco. La carpeta y el diseño han quedado bastante guay, todas las canciones que hay, todo el esfuerzo. Cierto orgullo también en todo el trabajo que se está haciendo, desde las canciones hasta luego la promoción de El Club de los Sentimientos, nos está ocupando tiempo pero lo hacemos con ilusión y, sobre todo, con ganas.
Yago: No entiendo cómo no nos han preguntado esto nunca. Me gustaría mucho que la gente lo escuchara entero. Tómatelo con calma, concéntrate en el disco y métete. Son cuarenta y cinco minutos, no es tanto realmente. El disco es como un viaje, va subiendo, va bajando, disfrútalo. Hay que darle tiempo, no es un disco que entre a la primera y ya está. A la primera sí, funciona, pero te pierdes muchos detalles. Hay tantas cosas, no sólo canciones, detalles que te pueden pasar desapercibidos.
Pol: Con un buen puro y una copita.
Yago: Pues sí, es un disco de copa y puro, ¿qué pasa? No, no, es una broma [risas].