Lucas Bolaño nunca escogió el camino fácil. En 2019, ante una nueva disyuntiva, optó por la publicación del disco que nos ocupa, el primero que entregaba como Estrella Fugaz. La verdad está en las canciones y, en ese sentido, «Un sendero fluorescente» resulta revelador. «No dejes de hacer siempre lo que te dé la gana», le oímos cantar en «Mineros». El artista madrileño ha picado mucha piedra para llegar hasta aquí, pero es en estas 13 canciones la primera vez que topa con determinados materiales preciosos.
Bolaño hizo una apuesta decidida por las melodías, ampliando de esta manera una paleta de colores que hasta ahora no registraba tonos fluorescentes. Destaca también la vertiente narrativa, inédita en sus anteriores proyectos. Se debe, en gran parte, a la capacidad acreditada de su autor para observar la vida con las dosis justas de cinismo y ternura. Las viñetas que dibuja en esta colección de canciones presentan trazo claro y lacerante sinceridad. Lo cotidiano es algo extraordinario, bien lo sabe este toledano de 41 años.
«Un sendero fluorescente» también incluye polaroids sobre el estado de las cosas en el mundo de hoy. En «La revolución será de pago» adquiere tintes políticos explícitos, pero en líneas generales se expresa desde un prisma costumbrista. La paternidad aparece en cortes como «Luminosa» o «El lado oscuro de la crianza«, títulos que encarnan a la perfección la dualidad que reside en lo más profundo de este trabajo.
A lo largo de esta obra se produce un curioso cruce de referencias intergeneracionales que pone a prueba a los amantes de la cultura pop. Shizuka, Pavement, Doctor en Alaska, Gúdar, NOFX, Mary Poppins, Max Rockatansky o la teniente Ripley, desde la publicación de este trabajo, pueden decir que tienen algo en común. «Un sendero fluorescente» casa a la perfección inmediatez cruda con el punto justo de sofisticación. Resulta difícil determinar cuál es exactamente el ingrediente que le aporta esa pizca de extrañeza que ciertos discos necesitan para dejar embelesado a quien lo escucha. El caso es que lo tiene.
La presente reedición llega apenas tres años después del estreno de «Un sendero fluorescente». Servirá, por supuesto, para saldar una cuenta pendiente con el que fuera uno de los álbumes encumbrados por las listas de lo mejor de 2019. A su vez, brinda un pretexto inmejorable para revisar una discografía que en 2022 se vio engrosada por «Luminosa», el segundo LP de Estrella Fugaz, y que en 2023 contará con una nueva pieza: un EP del pronto revelaremos más detalles.
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