Los legendarios Pink Floyd continúan el cruce de acusaciones al que tienen acostumbrados desde hace un tiempo. Esta vez las disputas se han retomado por el texto del panfleto de una reedición de Animals (1977) que próximamente verá la luz. La edición está remezclada por el productor James Guthrie y los textos en cuestión redactados por el periodista Mark Blake. La información la ha dado a conocer el bajista/vocalista Roger Waters en su página web personal. El integrante no ha podido difundir su comunicado a través de las redes de la banda porque, según dice, David Gilmour (guitarrista/vocalista) se lo tiene prohibido.
Es, precisamente, entre estas dos partes entre las que discurren las disputas. En el anuncio Waters informa de que las anotaciones de Blake incluían alusiones a las discordancias entre lo que Gilmour dice haber aportado a la banda y la realidad. La remezcla de este clásico se acabó en 2018 pero continuaba retrasándose porque el guitarrista quería vetar estas anotaciones como condición para su publicación. «No rebate la veracidad de la historia descrita en las notas de Mark, sino que quiere que la historia quede en secreto«, acusa Waters.
Por lo pronto, el bajista ha cedido a las exigencias de Gilmour para poder sacar adelante la remezcla. Sin embargo, sigue aseverando que esta acción es una pequeña parte de la campaña de «feroces mentirijillas» que lleva difundiendo el guitarrista desde hace 35 años. La versión vetada del texto del libreto está adjunta en el propio comunicado que ha difundido Waters. «No hay nada controvertido, sólo simples hechos«, aclara.
Asimismo, Roger Waters ha utilizado el comunicado para hacer campaña de publicidad de las memorias que está escribiendo y de las que todavía no hay fecha de publicación. El bajista aclara que su autobiografía estará plagada de referencias a este tipo de mentiras de Gilmour. «¡LA HISTORIA ENTERA DE LO QUE REALMENTE PASÓ ESTÁ EN MIS MEMORIAS!», publicita Waters. Continuando con su campaña de publicidad, el bajista de Pink Floyd comparte en el comunicado una historia que, según dice, es prueba de la «falsa narrativa» de David Gilmour.
Se trata de una entrevista que concedió Gilmour en 1982 para la revista Rolling Stone. En ella, el guitarrista explica muy vagamente el proceso de producción del sonido de la caja registradora que abre el tempo de la canción Money. Además de proporcionar una explicación muy poco precisa, habla en todo momento en plural, incluyéndose en el proceso. Waters asegura que Gilmour nunca estuvo presente en la confección de ese sonido: «no tiene ni idea de lo que está hablando«. El bajista aclara que ese efecto sonoro lo produjo él mismo en el estudio que compartía con su mujer en Islington, Londres.
Por su parte, David Gilmour cerraba toda posibilidad a una reunión de Pink Floyd en una entrevista para Guitar Player. «Ha seguido su curso, estamos terminados. Estoy a favor de que Roger haga lo que quiera y disfrute con ello. Pero definitivamente no quiero volver. No quiero tocar en estadios. Soy libre para hacer exactamente lo que quiera y como quiera hacerlo«, aseveró tajantemente.