«Tengo toda la casa llena de guitarras para colgar en la pared. Me cuesta desprenderme de ellas. Seguro que a mucha gente le pasa, porque todo tiene un recuerdo» (SAMANTHA FISH)
Digan lo que digan el blues sigue siendo el alma mater de la música moderna. Muchos son los que a lo largo de su existencia han ido alimentado esa presencia y poderío, tanto hombres como mujeres. Pero el rock blues va más allá de los sexos. Va de sentimientos y Samantha Fish es un ejemplo de ello. Su último trabajo, Paper Doll (2025), es una expresión de su talento y dedicación a la música. Más de 15 años avalan sus artes. Cabe recordar que Samantha Fish actuará en España el viernes 13 de junio (BBK Bilbao Music Legends Fest), el sábado 14 de junio (Teatro Eslava de Madrid) y el domingo 15 del mismo mes (sala Razzmatazz 2 de Barcelona).
Conocida por su habilidad técnica y su emotiva voz, esta guitarrista y cantante estadounidense nació en Kansas City, Missouri y, como mucho de los grandes nombres, comenzó a tocar la guitarra a los 15 años, inspirándose en artistas como Stevie Ray Vaughan y Jimi Hendrix. Gracias a su talento, pronto se convirtió en una figura destacada en la escena musical de su ciudad natal. Tras lanzar varios álbumes independientes, firmó con el sello Ruf Records. Su álbum debut, Live Bait, en 2009, la catapultó definitivamente hacia el éxito. Desde entonces, ha lanzado diversos trabajos, todos ellos altamente aclamados por la crítica. Su estilo es una emotiva y enérgica fusión de blues, rock y soul.
Paper Doll es un disco que sintetiza una expresión con diferentes interpretaciones según su contexto. Literalmente, es una figura recortable de papel que se usa como juguete, generalmente con ropa y accesorios que se pueden cambiar y ajustar, permitiendo crear diferentes atuendos y estilos. En sentido figurado, suele referirse a una persona que es manipulada o controlada por otra. Sin embargo, en la cultura popular o en el arte, puede simbolizar la fragilidad, inocencia así como la idea de ser una persona moldeable, susceptible a cambios o influencias externas.
Samantha Fish abraza este término en su amplio abanico de significados, especialmente con el fin de explorar temas como el amor, la pérdida y la autorreflexión. Todas las letras están llenas de significados y simbolismos. Por ejemplo, la canción título, habla de la fragilidad de las relaciones humanas y de la facilidad con la que pueden romperse. Otras pistas hablan de traición, decepción, amor desatendido, de control y lasitud. En general, son letras pensativas que conversan sobre experiencias universales en las que muchas personas se pueden identificar, especialmente mujeres.
«Cuanto mayor te haces, más insensible te vuelves a todas las cosas malas que pasan en la vida, ya sean amigos que mueren antes de tiempo o trabajar tan duro y nunca llegar a donde quieres estar. Pero la verdad es que nunca deberíamos acostumbrarnos a que nos rompan el corazón de esa manera» (SAMATNTHA FISH)
Como álbum Paper Doll ha tenido éxito comercial. Grabado entre los conciertos de finales de 2024 y principios de 2025 en los estudios The Orb (Austin) y Savannah Studios (Los Ángeles), los elogios no han parado de llegar. Publicaciones como Rolling Stone y Blues Rock Review, entre otras, han dejado constancia de ello. Es más, al mismo tiempo el disco ha debutado en el número 1 en la lista de álbumes de blues de Billboard, y ha sido nominado para varios premios, incluyendo el galardón al Mejor Álbum de Blues Contemporáneo en los Premios Grammy. Paper Doll es, por tanto, un grito crudo y reflexivo que encapsula el espíritu feminista que pugna contra los malos tiempos que vivimos, síntoma que queda expresado a través de riffs cortantes, arreglos dinámicos y una voz que puede pasar de la suavidad a la potencia en cuestión de segundos.
El álbum inicia su apertura con I’m Done Runnin’, un tema que expresa un rechazo a la huida y a la evasión de los problemas con el fin de mantener una decisión firme de afrontar la realidad con valentía. La cantante habla de dejar atrás las dudas, las inseguridades y las mentiras, y de tomar control de su destino. La narrativa transmite un mensaje de empoderamiento, con un tono que combina vulnerabilidad y fuerza, reflejando la evolución personal del personaje principal. El lenguaje es directo, con frases que enfatizan la resolución de no seguir huyendo y de enfrentar las dificultades con determinación: «Me estoy convirtiendo en alguien que nunca he conocido. El pasado se está deshaciendo».
En Can Ya Handle the Heat? se refleja una actitud empoderada enfrentándose a las adversidades. La narrativa es enérgica y directa, con líneas que transmiten una sensación de desafío y resistencia. La temática central gira en torno a la intensidad y determinación para mantener la autenticidad: «Cada diablo tiene un traficante y está caminando en mi camino (…) ¿Estás ciego? (…) abre los ojos».
Esa apertura nos conduce a Lose You, pista que irradia desamor y pérdida emocional. Fish expresa sentimientos de tristeza y vulnerabilidad ante la partida de alguien importante en su vida. Frases como «Podría cansarte en solo un fin de semana. Crees que eres dura, pero no has estado en lo más profundo. Yo quiero ser tu dios y tú solo ves un fraude», transmiten una sensación de impotencia y aceptación de la realidad de la separación. La canción también puede interpretarse como una reflexión sobre el proceso de duelo y la dificultad de dejar ir a alguien a quien se ha amado profundamente.
Sweet Southern Sound surge como un blues swing que evoca referencias a la música, comunidad y tradiciones del sur norteamericano. La letra transmite un sentimiento de orgullo y pertenencia, resaltando cómo ese sonido y espíritu sureño influyen en la vida y en la música de Samantha. La narrativa incluye metáforas relacionadas con la naturaleza, el ritmo de la vida y la influencia de la música en la cultura local: «Mis ambiciones ciegas me pusieron bajo tierra. Pero no necesito nada, solo ese dulce sonido sureño».
Tras finalizar el mismo, llega Off In the Blue. La canción transmite introspección, nostalgia y una sensación de alejamiento emocional o físico. La narrativa sugiere un estado de querer escapar o desconectarse de las dificultades cotidianas, buscando tranquilidad o un refugio en un lugar imaginario o en un estado mental que transmite un deseo de escapar de las preocupaciones y sumergirse en un espacio de paz interior: «Eres un trueno distante rodando por los bordes de mi corazón (…) El pasado es un marco roto (…) Sé que la mitad de lo que soy sigue siendo la mitad de lo que tú también eres».
Tremendo final que facilita el arte de Fortune Teller, una sensación de anhelo por entender lo que está por venir, usando la metáfora de un adivino para simbolizar esa búsqueda de orientación. La narrativa incluye líneas que expresan dudas, esperanza y resignación ante lo desconocido, invitando al oyente a reflexionar sobre la incertidumbre y la fe en que el destino será revelado eventualmente: «Me llevaste al borde (…) y mataste mi amor (…) Déjame vivir dentro de mi linda mentira».
Rusty Razor (Ft. Mick Collins) se presenta con metáforas relacionadas con el dolor, la vulnerabilidad y la resistencia. La canción utiliza imágenes evocadoras, como una navaja oxidada («rusty razor»), que puede simbolizar heridas antiguas, emocionales o experiencias pasadas que aún duelen pero que uno aprende a soportar: «Pensé que el amor que perdí sería mi herida más grande y profunda Pero los amigos y los amantes caen antes de que la llamada pueda pasar».
Y como no, alcanzamos la pieza homónima del álbum, Paper Doll, donde la cantante expresa sentimientos de haber sido herida o utilizada en el pasado, pero también muestra una actitud de resiliencia y determinación para no dejarse manipular ni romper por las circunstancias o las personas negativas. La letra combina metáforas relacionadas con la fragilidad y la fortaleza, evocando la idea de que, aunque pueda parecer delicada o frágil como una muñeca de papel, en realidad posee una fuerza interior que la hace resistente: «Me sujetas solo para derribarme, no soy tu muñeca de papel».
El cierre del esférico se materializa con Don’t Say It, donde Samantha expresa sentimientos de frustración y la necesidad de evitar palabras que puedan agravar la situación, sugiriendo un deseo de mantener la calma y evitar conflictos innecesarios. La repetición de la frase «don’t say it» enfatiza la urgencia de controlar lo que se dice para no dañar aún más la relación: «El diablo está en los detalles, nena. Sabes cómo hacer que duela. Tus ojos no coinciden con lo que tus labios dicen».
«Soy fan del punk rock. Me encanta toda esa época. Me hechiza esa forma cruda y desinhibida de tocar. No tiene nada de pretencioso. Incursionar en los límites: ahí es donde reside la verdadera garra» (SAMANTHA FISH)
En conjunto, toda la instrumentación usada en el disco refuerza la temática de las canciones. Los riffs de la guitarra eléctrica aportan un carácter emocional y enérgico que, junro a los efectos (overdrive, slide, reverd, vending, vibrato o delay), crean un sonido áspero y vibrante, pero su vez espacial, intenso y melancólico. El bajo proporciona una base rítmica sólida, ayudando a mantener en todo momento el groove de los tracks. La batería, por su parte, mantiene un ritmo marcado y constante, con golpes secos e intensos que transmiten firmeza y movimiento en los tiempos clave. Otros instrumentos como teclados diversos incluyen sus detalles sonoros a fin de crear un background de contrapeso.
No cabe duda de que el aspecto más resaltante de Samantha Fish, es su virtuosismo con la guitarra y su capacidad para fusionar el rock, el blues y el soul, así como experimentar con diversos efectos y técnicas de ejecución, características todas que la convierten en una solista excepcional en el género. Su potente y apasionada voz, se complementa perfectamente con el sonido que se desprende de sus dedos, permitiéndole transmitir sentimientos complejos y autenticidad.
Pero Paper Doll es mucho más que lo descrito; es una declaración artística y social que refleja su crecimiento donde la mujer en la música aún se enfrenta a obstáculos. Dentro de esa problemática y rebeldía, Fish ha emergido como una figura que desafía los estereotipos, promoviendo la igualdad y diversidad en la escena musical. Paper Doll reafirma a Samantha Fish como una de las artistas más influyentes y originales de su generación, dejando una huella imborrable en la historia del género y en el panorama musical actual. Si te gusta el rock-blues-soul esta es tu chica.