Trabajan en la intimidad y nunca fuera. Y no solo porque el contexto de los últimos años lo haya querido así: Blanco Palamera llevan abriendo su corazón desde el primer acorde, y esa misma intimidad que los llevó a ser hermanos de padre y madre y distinto es lo que los encontró en INTIMIDADE, con mayúsculas y sin ambages: un segundo álbum llamado a alumbrar de una vez por todas qué es eso del «nuevo pop».
Un «nuevo pop» en el que las melodías redondas colindan con texturas que van del future funk a las programaciones electrónicas, del bolero al groove del r&b, de las nanas para no dormir a la música para hacer petting, del pop progresivo a los hits de una radiofórmula alternativa.
De lo que duele a lo que adoramos, de lo que nos hace salvajes a lo que nos pone blanditos. De una honestidad y una frontalidad abrasadora; INTIMIDADE forja uno de los repertorios más cálidos, abrazables, bailongos e íntimos que nos hayamos encontrado en el circuito.
Un repertorio mayúsculo, llamado a ser absolutamente revelador en las producciones de pop alternativo en español, del que ya conocíamos los adelantos «Verte Ganar», «No Juega», «Pelear» y «Al mirar», cuatro gemas que alumbraron diferentes facciones de esa modernista mirada pop que tienen unos Blanco Palamera capaces de mantener su identidad tanto cuando se acercan al funk como al pop progresivo, al indie-dance tropicalista o al pop mayúsculo
Un álbum que llega a tres años de la publicación de Promesas, uno de los álbumes omnipresentes en las listas de lo mejor del año en 2019, lo que les llevó a ser unos habituales de los festivales de ese año y a llenar salas de mediano aforo en varias de las ciudades centrales del circuito estatal o sumirse en la que fue su primera gira mexicana en las primeras semanas de 2020, antes de la pandemia.
Blanco Palamera – INTIMIDADE
¡Te esperamos en Telegram!
¡Suscríbete a nuestro canal de Telegram y no vuelvas a perderte ninguna novedad!
